El Bestguarder SY007Plus es un detector de movimiento de caza con sistema de alarma inalámbrico diseñado para avisar al cazador cuando se produce actividad en una zona de paso. El conjunto combina sensores de movimiento PIR resistentes al exterior con un receptor portátil que puede llevarse en el bolsillo o sujeto al cinturón, proporcionando avisos mediante vibración, sonido y luz LED.
Con un alcance de transmisión inalámbrico de hasta 300 metros en condiciones abiertas y sensores con una distancia de detección ajustable de hasta 15 metros, este sistema se convierte en una herramienta muy útil para la caza de espera, la observación de vida silvestre y la vigilancia de accesos en fincas o áreas rurales.
El SY007Plus se compone de un receptor inalámbrico de 433 MHz y varios detectores de movimiento infrarrojos pasivos (PIR). Cuando uno de los sensores detecta movimiento dentro de su rango (por ejemplo, el paso de un ciervo o jabalí), envía una señal inalámbrica al receptor, que responde con una alarma sonora, vibración y una indicación mediante LED.
El receptor dispone de indicadores de zona numerados (1, 2, 3, 4, 5) que permiten identificar qué detector ha sido activado. Esto ayuda a saber en qué dirección o punto del monte se ha producido el movimiento, facilitando la toma de decisiones sobre hacia dónde dirigir la atención.
Cada detector PIR puede ajustarse para detectar movimiento hasta aproximadamente 15 metros en un entorno abierto, lo que resulta adecuado para cubrir sendas de paso, entradas a comederos o zonas de tránsito habituales de la fauna. A su vez, la señal inalámbrica entre sensor y receptor puede alcanzar unos 300 metros en condiciones óptimas, permitiendo colocar la alarma a una distancia prudente del punto de espera.
Es importante tener en cuenta que la presencia de árboles densos, desniveles del terreno u obstáculos como edificaciones puede reducir algo este alcance, por lo que conviene realizar pruebas en el terreno concreto donde se vaya a utilizar el sistema.
El receptor Bestguarder SY007Plus ofrece tres modos de aviso: alarma sonora, vibración y luz LED. Estos modos pueden combinarse o utilizarse de forma independiente según las preferencias del usuario y las condiciones de caza.
Por ejemplo, en situaciones donde se requiere máxima discreción, se puede priorizar la vibración silenciosa y la indicación mediante luz LED, evitando sonidos que puedan delatar la posición del cazador. En otros escenarios, una alarma sonora puede ser suficiente para avisar de la presencia de animales o intrusos en la zona vigilada.
Tanto los sensores como el receptor están diseñados para soportar condiciones de exterior. Los detectores PIR cuentan con carcasas resistentes al agua y a los golpes, lo que les permite seguir funcionando bajo lluvia ligera, humedad ambiental y pequeñas inclemencias del tiempo propias del monte.
Aun así, siempre es recomendable instalar los sensores de forma que queden lo más protegidos posible de la lluvia directa y revisar periódicamente que las juntas y tapas estén bien cerradas para evitar filtraciones de agua.
El sistema permite enlazar hasta cinco detectores PIR con un mismo receptor. Esto hace posible cubrir varios puntos estratégicos alrededor de un puesto de caza o de una zona de observación, obteniendo una imagen más completa de la actividad de los animales en el entorno.
Al encender tanto el receptor como los detectores, el sistema realiza la conexión inalámbrica de forma automática. Cada vez que uno de los sensores se enlaza correctamente, el receptor puede indicar con luz y vibración qué canal está activo, ayudando a identificar cada dispositivo.
Aunque su uso principal está pensado para cazadores que desean ser avisados de la aproximación de animales, el Bestguarder SY007Plus también puede emplearse como sistema de alarma básico en áreas rurales, entradas a fincas, caminos de acceso o zonas de almacenamiento al aire libre.
Del mismo modo, resulta interesante para quienes realizan observación de vida silvestre, ya que permite saber cuándo se activa el sensor en una zona concreta, avisando de la posible presencia de animales sin necesidad de estar constantemente vigilando con prismáticos.
Aunque las especificaciones detalladas pueden variar, este tipo de sistemas suele funcionar con pilas convencionales (AA o similares) tanto en el receptor como en los sensores. Esto facilita encontrar repuestos y permite llevar pilas de reserva en la mochila para cambiarlas en el campo si fuera necesario.
La autonomía dependerá del tipo de pilas y del uso que se haga del sistema, pero en general está pensada para cubrir varias jornadas de caza o varias noches de observación sin necesidad de cambios constantes.
La colocación de los sensores es un punto clave para sacar el máximo partido al SY007Plus. Lo habitual es fijarlos a árboles, postes o soportes firmes a la altura adecuada, orientándolos hacia los caminos de paso o zonas de interés. Ajustar el ángulo y la distancia de detección ayuda a reducir falsas alarmas provocadas por ramas en movimiento u otros elementos del entorno.
El receptor, por su parte, puede llevarse en el bolsillo, colgado del cuello o fijado al cinturón, de manera que la alarma resulte fácil de percibir sin interferir con el manejo del arma o del resto del equipo.
Elegir el detector de movimiento de caza Bestguarder SY007Plus significa incorporar a tu equipo un sistema de aviso temprano que puede marcar la diferencia entre detectar a tiempo la aproximación de un animal o perder la oportunidad. Su combinación de alcance inalámbrico de 300 m, sensores PIR resistentes y múltiples modos de alarma lo convierten en una herramienta muy completa para caza y vigilancia.
Si buscas un sistema que te ayude a anticipar el movimiento en tus puestos de caza o a vigilar discretamente zonas clave de tu finca, el Bestguarder SY007Plus ofrece una solución práctica y probada dentro de su categoría de detectores de movimiento inalámbricos.





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